Imagen y éxito: la importancia de comunicar nuestra esencia

El éxito es una sensación de bienestar con respecto a cómo vivimos nuestra vida y de satisfacción con respecto a nuestros logros, que pueden estar relacionados con el trabajo, con la familia, con un modo de vida o con una forma de sentirse, y es distinto para cada persona.

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La importancia de la imagen

Existen muchas formas en las que una persona logra ser exitosa dependiendo del contexto en el que vive y el momento de la vida que está experimentando y no depende de la clase social, de los bienes o de la fama que tenga, el éxito se alcanza cuando lo que se hace es coherente con lo que se es.

La Imagen personal es mucho más que la vestimenta, incluye también la postura, los movimientos, los rasgos físicos, la manera de caminar, la mirada, la risa, el tono de voz, la higiene, la cortesía, la educación entre otras cosas, la buena presencia.

Ser y sentirse agradable a la vista de los demás, hace a las personas más seguras de sí mismas, lo cual mejora su desarrollo personal, profesional y social.

La forma como nos sentimos, como vestimos, caminamos, hablamos, combinamos texturas, colores, tonos, la manera en la cual preparamos nuestro arreglo personal para una junta, para una cita, para un día cualquiera, envía un mensaje hacia el resto de las personas con la que compartiremos el momento.

Proyecta la imagen a la altura de tu éxito

La Imagen es como nos perciben los demás, es nuestra carta de presentación y refleja la manera en que queremos relacionarnos con el mundo y con los demás, y no es algo superficial ya que nuestra imagen debe proyectar valores personales y metas profesionales.

Estudios demuestran que la imagen puede ser un factor clave para alcanzar un objetivo profesional. Cuando logramos mostrar confianza por medio de la imagen que proyectamos es probable que seamos más aceptados y logremos vender una idea, un producto o un servicio.

Nadie puede evitar proyectar una imagen y, la vestimenta, sea ejecutiva o casual, habla por nosotros sin palabras y refleja el liderazgo, seguridad personal, experiencia, nivel educativo, cultura, capacidad, qué tan lejos deseamos llegar y, por supuesto, nuestra autoestima.

Nuestra imagen puede catapultar o frenar el éxito, es por eso por lo que debemos prestar atención y trabajar interna y externamente para proyectar la imagen que nos va a ayudar a lograr nuestros objetivos y alcanzar la felicidad.

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